La reflexología es una técnica china milenaria que trata zonas reflejas. Al aplicar el masaje se observaba que este no solo beneficiaba a la zona del cuerpo en la que se había aplicado, sino que también mejoraba otras zonas. El descubrimiento de esta influencia a nivel reflejo sobre distintas áreas corporales, fue lo que dio origen a esta terapia.
La reflexología trabaja estimulando puntos de presión que tenemos en los pies. En estos puntos se reflejan todas las terminaciones nerviosas del sistema nervioso central, órganos, y estructuras internas. La planta del pie es como un pequeño mapa de cada componente de nuestro organismo.
Mediante estas terminaciones nerviosas que se ubican en los pies, un reflexólogo puede estimular cualquier parte de nuestro cuerpo, y establecer un equilibrio. Lo que hace que el este funcione de manera óptima, y se elimine toda posibilidad de contraer alguna enfermedad.
También se genera una profunda sensación de bienestar, y se consigue un muy buen nivel de energía. Por los resultados obtenidos, la reflexología fue ganando un espacio en el lugar de las terapias alternativas.
Durante años se supo que estos masajes funcionaban, aunque no se sabía muy bien el porqué. Mediante estudios recientes la razón por la cual estos masajes son sumamente efectivos, salió a la luz. La técnica de masaje que utiliza esta terapia es la de eliminar las toxinas acumuladas en el organismo. Estas toxinas se alojan en el punto más bajo de nuestro cuerpo, o sea, los pies.
En algunos casos las toxinas forman cristales que pueden sentirse debajo de la piel, son diminutos, tienen el tamaño de un grano de azúcar. Estos cristales pueden ocasionar bloqueos en la zona de reflejo, impidiendo el normal funcionamiento de la parte del organismo que se encuentra bloqueada.
En la medicina oriental se cree que estos bloqueos son la causa de muchas enfermedades. Estos pueden ser consecuencia de varias razones diferentes, puede ser físico, a causa de lesiones, intervenciones quirúrgicas, ingesta de medicamentos. Incluso por causas emocionales, estrés, ansiedad y depresión.
Esta terapia ha obtenido muy buenos resultados en el tratamiento de cefaleas, trastornos digestivos, estrés, artritis, insomnio, desequilibrios hormonales, síndrome premenstrual, estreñimiento y dolores óseos.
La reflexología es relajante, reduce el estrés, mejora la circulación, elimina toxinas, aporta energía, es revitalizante. Es placentera tanto para quien recibe los masajes como para quien los suministra.
Esta es una terapia alternativa, que no reemplaza a la medicina convencional, sino que la complementa.