La fitoterapia, es una terapia alternativa, esta consiste en tratar las enfermedades mediante las sustancias obtenidas de los vegetales. En los últimos años se ha descubierto que la menta tiene muchas propiedades. La menta es una planta perenne pertenece a la familia de las labiadas. Tiene un aroma intenso. Su cultivo es muy sencillo, el único requerimiento es el agua abundante. Puede cultivarse en la tierra de un jardín o en una maceta.
La menta es muy efectiva para:
Mejorar el funcionamiento del aparato digestivo en este caso la menta actúa como un relajante del estómago y las funciones del hígado. Tomar una infusión hecha con hojas de menta seca resulta muy efectiva cuando aparecen síntomas de dolor de estómago o molestias en él hígado. Para hacer la infusión coloca en una cacerola por cada taza de agua una cucharada de hojas de menta seca.
Actuar como descongestivo de las vías respiratorias. Se la recomienda para tratar gripe y resfrió. La menta produce sudoración lo que contribuye a eliminar el calor corporal y a despejar las vías respiratorias. Las infusiones de menta te ayudaran mucho en procesos de congestión respiratoria. En el caso de la bronquitis, el contenido de ácido acético y ascórbico que contiene la menta, contribuye a disolver la mucosidad de los bronquios y facilita su expulsión.
Ayudar a combatir la halitosis a través de una infusión. Coloca una cucharada de hojas secas por taza de agua, tómala por lo menos dos veces al día. Eso te ayudara a combatir el mal aliento. También te ayudara con este problema, el dejar de consumir algunos alimentos con sabores muy fuertes, como la cebolla y el ajo. Puedes utilizar esta infusión como enjuague bucal, después de cepillar tus dientes o entre cepillado.
Es utilizada para uso externo para problemas en la piel. Esta planta tiene más de 30 principios activos y antisépticos, y más de cuarenta principios antibacterianos. Es un cálmate de lo más efectivo en el caso de urticaria, sarpullidos y picaduras.
La menta es también un sedante natural, se la utiliza como como calmante en el caso de palpitaciones cardíacas. Se recomienda en estos casos beber agua con unas gotas de menta.